FOTOS. El chavismo con el lente de ovario. #3A
Continuando con la objetividad y la verdad, sin miedo a los
radicalismos de lado y lado, aquí vengo con la marcha roja.
Llegué al Centro para poder tener una opinión real de la
marcha chavista. Y si, digo chavista porque no escuché en ningún lado nombrar a
Maduro. Todas las consignas, todos los cánticos eran para Hugo Chávez.
Ahora bien, esta gente marchaba contra la corrupción, pero
déjenme decirles que todo lo que vi no tenía otro nombre que corrupción. El uso
del dinero público para resaltar eso que llaman socialismo chavista. Conté más
de cien camionetas último modelo en la marcha. Tarimas con equipos de sonido,
grupos musicales en cada esquina del recorrido. Me caminé desde la Hoyada hasta
más allá de la Defensoría y eso era ver cornetas, equipos, andamios, afiches,
pancartas, que no es gratis ni hecho por el pueblo, toda una inversión bien
costosa, mientras nuestros hospitales tienen fallas de recursos, igual nuestras
escuelas, y el talento humano, esos profesionales de todos los gremios pasando
trabajo hereje. ¿Quién paga todo ese despliegue de recursos?, eso no es corrupción,
¿cómo se llama que yo no sé?.
Para gastar sin permiso de nadie no existen límites, ellos si
pueden disponer del dinero de la nación para gastar a mano suelta, sin que
nadie los juzgue, porque TSJ es rojo y sí saca a un diputado de oposición para
decir que luchan contra la corrupción. FARSANTES.
Ahora bien, puntos importantes a destacar.
Había mucha más gente roja en la calle, que opositores en Los
Ruices, cuando yo pensé que las calles de Caracas se iban a desbordar por tanta
tragedia, pero no, la maquinaria roja está como los nazis en su tiempo de
gloria.
Había muchos jóvenes en el Centro, los que no vi en Los
Ruices.
Había más alegría, más fuerza en los chavistas, que en la
concentración de oposición. Claro, ellos al menos si tenían algo que celebrar,
se mantienen en el poder, obvio.
No pertenezco a ningún partido político, yo soy venezolana,
que me duele el país y a él me debo. Pero la verdad siempre debe estar de
frente, no escondida, porque no sería verdad. Sin importar lo que me digan de
lado y lado, sólo tengo un lado y es mi patria escoñetada. Y aquí, el engaño ha
sido de los lados.
Yo no quiero una patria socialista, porque sencillamente es
una farsa. Pero tampoco quiero esperar el dos mil no sé cuánto, para tener país
de nuevo.
Luchar es arriesgar, es luchar, es amar, es sentir esta tierra
como tuya.
Hoy vimos dos lados del país que tenemos, no es invento. Uno reunido
en una calle y otros libres caminando y en el video que mostraré
posteriormente, podrán entender mis palabras. Unos bailan, otros perdidos, sin
saber a dónde ir, como a la espera de algo, pero sin saber qué.
Dios todopoderoso, ilumina a mi Venezuela querida, pero
ultrajada.
3-agoto-2013
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